Confesión

No quiero ser una cobarde más en esta vida que se asuste con los sinsabores que haya dejado y se deje llenar el corazón de amargura por no permitir cabida a la libertad.

No me quedaré sola en mi interior alejando cada destello de alegría sólo por no perderlo después y sufrir. Pues es tormentoso después de un dolor profundo, de una gran herida vivir.

¡Sí, es difícil!

Es fácil querer dejar de ser, de existir.

Es fácil temer y dejar de luchar.

Yo no seré así.

Quiero ser valiente.

Voy a vencer la resistencia de la decepción, del engaño, la manipulación.

Haré frente a la tortura de la desilusión y las fuerzas del odio.

¡Seré una valiente más y una cobarde menos!

Que se atreva a luchar por ese poco de bien que no ha sido derrotado.

Con tus fuerzas Dios, y no con las mías.

Seré una cobarde menos y una valiente más.

Triunfaré en la batalla con el temor y ganaré al miedo de perder.

Así prefiero seguir.

Soy una valiente más y una cobarde menos, capaz de contender contra lo injusto de este mundo y con las armas del amor combatir.

Meligsa Funes