Que ésta lluvia
arrastre tu dolor a la habitación del olvido
donde a puerta
cerrada no pueda salir.
Y que las blancas
aguas que a través de ella caen
limpien tu corazón de
todo inútil sufrir.
Que el inmenso frío
que a tu vida arropa
por la soledad en que
quedaste cuando le viste partir.
Huya con los truenos
de esta tempestad loca,
diga adiós para
siempre
y jamás vuelva a
surgir.
By Mel Funes
Comentarios
Publicar un comentario
Puedes dejar tu comentario...Gracias